Contó Gilberto Gil que João Donato fue a visitarlo con una docena de temas instrumentales para ver si les podía poner letra. Todos ellos estaban dedicados a su novia Leila. Tras la charla, Donato se recostó en el sofá a hacer la siesta.
Gil se puso manos a la obra con el tema titulado provisionalmente "Leila IV" mientras Donato dormía tranquilo. Podemos imaginar la mansa figura de Buda del querido pianista. Al despertar, la canción estaba terminada.
Era el año 1986, y el resultado fue esta canción, "A paz", estrenada en 1987 por la gran estilista de la música popular brasileña, Zizi Possi.
La canción fue un éxito inmediato. Detrás de su apariencia sencilla y el obvio toque orientalizante, sin caer en el pastiche, hay una maestría harmónica superior. Una de grabaciones más difundidas es la del propio Gil en su disco "Unplugged", pero aquí los tenemos a los dos:
La paz invadiendo mi corazón
De repente lleno de paz
Como si el viento de un tifón
Arrancase todo el dolor
Donde ya no me entierro más
La paz trazó un mar de revolución
Que invadió mi destino, paz
Como aquella gran explosión
Una bomba sobre el Japón
Vio nacer un Japón de paz
Yo pensé en mí y pensé en ti
Lloré por los dos
Qué contradicción, la guerra alumbró
Nuestro amor en paz
Yo vi detenido mi navegar
Una senda llegó a su fin
El final de la tarde atrás
Donde el mar me arrebata así
Los lamentos de mi pesar
Sirva esta primera versión en español en tanto encuentro otra mejor que conserve el cromatismo del verso "onde o fim da tarde é lilás", que Donato amaba. Literalmente: donde el final de la tarde es lila.
- "A paz" (João Donato / Gilberto Gil)
- una versión cantable de Tive Martínez, 2024